La preferencia de construir o ser construidos

Es que somos tan fríos e implacables, ¿qué hemos de preferir el material, antes que la esencia misma de este? Es algo bastante aberrado, pero que se da demasiado...y peor aun cuando vivimos con el miedo, de que el sueño verdadero, ese que llega como una vocación directo al corazón, pero que nos da tanto miedo verlo truncado por cualquier cosa, que mejor lo hemos de dejar ahí estacionario con el fin de realizarlo en el futuro, mientras intentamos crear un soporte material, para algo que en verdad, no lo necesita demasiado.
En ese afán de observar a la gente, he vislumbrado, ciertos niveles de avidez mental en cuando a este tema, y es algo bastante fuerte, porque la gente que no sigue ese llamado, (que como lo veo y lo dicen muchas culturas, ya sea el del espíritu animal, el deseo del alma, etc.) constantemente esta tratando de nivelarlo con la creación de mas elementos de materialidad, que no llenan, y nunca llenaran ese vacio de sentirse vivos por dentro.
¿Qué muchos caen? yo diría que en cierto momento, todos nos vemos abatidos por esas dudas, y en una u otra forma cedemos, no somos dueños de una potencial liberación del alma, o de nosotros mismos, nos vemos dueños del miedo, y peor aun, poseídos por este, y ahí sucumbimos, perdemos esa guerra, y "nos vendemos", ¿es bueno o no? Creo que no, pero al menos permite un cierto nivel de equilibrio, uno no puede vivir en las nubes, pero es bueno tener alas para salir a flotar de vez en cuando...
En que me he equivocado yo, reprimí mi valor a mostrar lo que yo soy, vivir de lo que yo soy, dejar de lado mi arte de vivir, ¿sigo haciéndolo? Creo que cada vez menos, y eso se ve reflejado en mis actos del día a día... ¿Por qué? Porque yo floto en mi mente, y camino con los pies, agradecidamente encontré un equilibrio, entre el querer y el ser realmente.
Ahora porque me viene este tema a la mente, bueno es sencillo, veo en el día a día, a tanta gente arribista que lo único que quiere es escalar, en modelos y patrones que se imponen, pero que realmente no son nunca de ellos mismos, todos comparados con todos, cuando en verdad, deberían compararse con el deseo de ellos mismos, ¿y por qué? Por algo muy sencillo, porque uno debe ser feliz, y para eso, debe ser realista consigo mismo, y no con lo que hace el vecino, por esto yo puedo decir que lamentablemente, el ser que menos conocemos es nosotros mismos.
Y por eso que emprendo ese viaje, por eso que te invito a ese viaje, porque debemos conocernos, entender los llamados que son mas que nosotros mismos en toda su esencia, poder atender y ser capaces de contestar un llamado, que cuando avisa que viene, nos duele el estomago, nos da pena, nos da alegría, y muchas emociones, pero que si no nos conocemos, simplemente son un malestar, cuando en verdad, nos muestran un largo camino a la felicidad.
¿Que no capte yo? Mi arquitectura de la vida, ahora la capte, y mi presente es un trampolín que no dejara de lado nunca ese deseo de hacer arquitectura y observar todo lo que vea y me rodea, porque mi naturaleza es crear, y es que quiero crear sobre todo mi vida.
Un abrazo a todos
adiós.

A despertar, que el muro se debe llenar

Duermo para despertar, pues es prácticamente un renacer, empezar un nuevo día, pero con el plus de ya conocer, continuar el legado que se va dejando, pues en una forma algo retorcida, estamos venciendo a la muerte; dejamos toda posible consciencia, pero nuestro cuerpo y mente se mantienen activos, para luego en algún momento, hacer una conexión que nos vuelve a despertar, pues no siempre estamos despierto. Y acaso aun despiertos, ¿estamos conscientes de lo que vivimos? La vida es un juego, en el cual si no arriesgamos nada, no ganamos, y es fome, monótono, incluso, ausente de vida, pues como seres humanos que somos, tenemos una racionalidad que nos permite optar, y si no la usamos, no estamos viviendo, simplemente estamos ausentes de lo que podríamos decir que es vivir prósperamente.

Ahora muchos dirán, pero es un mecanismo de defensa, quizás a veces es mejor ausentarse y esconderse, bueno, haciendo eso simplemente estamos perdiendo antes de jugar, no nos damos oportunidad de ganar. Pues amigo, si tu esperas vivir preguntándote cómo será todo, estas dormido, y para los mallas, si tu espíritu duermes, no estas vivo.
Hablando solo por mi, a mi me gusta experimentar, sentir nuevas emociones, buscar lo desconocido y vivirlo, y a veces dentro de lo cotidiano encontramos placeres tan confortantes, que dan sazón al acto de estar despiertos, como por ejemplo, a mi me encanta el ver una película acostado, y tratar de conectarme con los actores que la realizan, es tonto e incluso quizás algo escapista, pero es una sensación que me gusta, así como también besar esa chica que me encrespa el estomago...
Todos estos días, he estado pensando en que si estamos despiertos, debemos de tener un pasado, que refleje y cimiento nuestro estar, que valide el acto de la consciencia, y es por eso que me puse a pensar en hacer un muro de los recuerdos, un acto bien sencillo, pero que de momento que yo pase por el, vea todo lo que he vivido, y me haga tener ganas de vivir mas. Y es que en este muro, es donde nosotros plagamos nuestro legado en vida, que no es ni mas ni menos, que estar vivos, aprovecharla y disfrutarla, y esto es una obra que dejamos tanto para nosotros, como para el resto, pues quienes nos quieren y apoyan, son felices de ver que sus seres amados, son felices, que ellos contribuyen.
El gesto y la señal de amor que regalamos o nos regalan, nos curten y nutren como personas, fecundan la buena voluntad y el buen vivir para el alma, y nos sanan de todo posible malestar o enfermedad, ya que todo nos demuestra que hemos vivido, y eso incluso mis amigos, vence a la muerte, porque aunque la vida se acabe, seguiremos presentes siempre entre los queridos, e incluso en todo, pues lo que se construirá alrededor de nosotros, nos tendrá como artífices, pues vivimos y construimos nuestro entorno.